Las islas del conocimiento y el proceso de aprendizaje

En ocasiones nos pasa que tenemos muchas ideas que contar pero nunca encontramos el momento o la manera de hacerlo. Incluso puede que las anotemos en diferentes formatos (desde una servilleta de papel, el cuaderno de toda la vida o hasta el OneNote). Pero paradójicamente también nos sucede que nos sentimos paralizados llegado ese momento de la creación en el que uno ha de encontrar el estado de ánimo, el tiempo y el espacio para contar algo especial, diferente, único, algo digno que decir y ser contado.

Quiero que este post sea mi reentrée, después de un tiempito, y siendo especial no contaré nada de especial, sino más de lo mismo.

Empiezo con una referencia a un post de ese enorme blog que es Brain Pickings…titulado «The islands of Knowledge: How to live with mystery in a culture obsessed with certainty and definitive answers» (Las islas del conocimiento: Cómo vivir con misterio en una cultura obsesionada con la certeza y las respuestas definitivas):

Para ir más allá de lo conocido, tanto Newton y Einstein tuvieron que tomar riesgos intelectuales, haciendo suposiciones basadas en la intuición y juicios de valor personales. Y el que así lo hicieran, a sabiendas de que sus especulaciones teóricas eran necesariamente defectuosas y limitadas, ilustra el poder de la fe en el proceso creativo de dos de los más grandes científicos de todos los tiempos. En mayor o menor medida, todas las personas empeñadas en el avance del conocimiento hacen lo mismo. Marcelo Gleiser The Island of Knowledge: The Limits of Science and the Search for Meaning

Me quedo con eso de que en mayor o menor medida, todas las personas empeñadas en el avance del conocimiento hacen lo mismo. Pienso en la relación con la evaluación, donde parece que todo tiende a estar estandarizado, pero donde por ahora no se han podido crear evaluaciones estándares, porque cada evaluando, cada evaluador y cada evaluación son únicos…porque depende tanto del factor humano, organizacional y psicosocial que envuelve a cada evaluando, cada evaluador y cada evaluación.

Además a pesar de los estándares, durante el proceso evaluativo también se tienen que tomar riesgos intelectuales, lanzando hipótesis basadas en la intuición, con aproximaciones sucesivas, a sabiendas de que nuestras especulaciones teóricas son necesariamente defectuosas y limitadas.

Hace poco una colega evaluadora me decía que no estaba contenta con su nivel de desempeño: Supongo que rodeados de tantos estándares pocas veces podemos estar satisfechos, y aunque vayamos mejorando en nuestra adopción de estándares, intuyo que nunca dejaremos de seguir tomando riesgos.

Y sin más postureo me despido espero que hasta pronto, no sin antes recordar algo de cine y música: ii 80 cumpleaños de Robert Redford ii (no somos nada) y el 61 cumpleaños de Manolo García (a muchos no les dirá nada, pero es ya una leyenda…el último de la Fila)

Y quiero pensar que si continuamos el proceso de aprendizaje nunca el tiempo es perdido

Y tras casi acabar este post, por qué no decirlo, me siento de nuevo como un halcón llamado a la filas e la insurrección ii …y es que ya os decía que era algo especial

 

 

 

Un pensamiento en “Las islas del conocimiento y el proceso de aprendizaje

Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.