Las agendas de aprendizaje se utilizan como una herramienta de aprendizaje organizacional para mejorar la efectividad y la eficiencia de las organizaciones. El proceso a menudo varía pero a menudo incluye un conjunto de pasos comunes. Esto incluye:
(1) Reunir a las partes interesadas relevantes y revisar la literatura para conocer lo que ya se sabe sobre el tema.
(2) Las preguntas de aprendizaje son identificadas y priorizadas.
(3) Se desarrolla un plan para responder esas preguntas e implementar actividades de aprendizaje tales como estudios y análisis.
(4) A menudo, las partes interesadas clave están involucradas en diferentes etapas dependiendo de la agenda de aprendizaje.
(5) La evidencia se difunde generalmente a través de productos de aprendizaje como informes o infografías para permitir que el personal utilice y aplique los hallazgos en su trabajo.