
Contexto
Desde 2022, la conversación sobre cómo coordinamos respuestas complejas ha virado hacia modelos basados en territorio y no solo en sectores. Informes recientes muestran que, ante crisis más urbanas, prolongadas y politizadas, mecanismos subnacionales y arreglos “no estándar” ganan peso —en parte por el impulso a la localización y al nexo HDP—, aunque sin reemplazar al sistema de clusters (ICVA, 2024; ALNAP, 2022; OCHA, 2025). La coordinación basada en área (ABC) surge aquí como una manera de integrar servicios y actores en una unidad geográfica concreta (FS Cluster, 2023).
Enfoque
La ABC define un área (barrio, distrito, asentamiento) como punto de entrada para el análisis, la planificación y la coordinación, articulando múltiples sectores y actores locales—autoridades, OSC, empresas de servicios— bajo una visión común. La guía del FS Cluster resume su valor: permite respuestas multisectoriales, participativas y ancladas en capacidades y gobernanza locales; suele coexistir con clusters y su aplicación es altamente contextual (FS Cluster, 2023). Evidencia comparada sugiere que un modelo híbrido (sectorial + basado en área) mejora ajuste contextual y coherencia operativa (Kemoklidze, 2022; ICVA, 2024).