Modelos de sistemas, percepción y realidad


En abril de 2025, el investigador canadiense Cameron D. Norman, experto en evaluación, pensamiento sistémico y diseño estratégico, publicó en su blog Censemaking un artículo titulado Rhinoceros In The Wild: System Models and Reality. En este post, Norman utiliza una poderosa metáfora visual —el célebre grabado del rinoceronte de Albrecht Dürer— para abordar una problemática muy actual: el uso excesivo y a veces acrítico de modelos de cambio en el diseño de intervenciones sociales y programas de cooperación.

¿Por qué este artículo merece atención? Este artículo resulta provocador y necesario porque cuestiona el uso extendido de modelos de sistemas que, aunque atractivos y bien intencionados, a menudo carecen de evidencia empírica. Como Dürer, que nunca vio un rinoceronte real pero lo ilustró a partir de relatos, muchas veces diseñamos estrategias de cambio basándonos en ideas no verificadas, suposiciones, o representaciones estilizadas que no reflejan fielmente la complejidad de los contextos en los que trabajamos.

Principales ideas y aportes al campo de la evaluación en cooperación

1. Los modelos no son la realidad

Norman sostiene que muchos modelos de sistemas circulan más como símbolos de cambio que como herramientas basadas en observación y análisis riguroso. Al tratar hipótesis como si fueran certezas, corremos el riesgo de construir soluciones sobre mapas equivocados.

2. La utilidad (y el límite) de los modelos visuales

La evidencia científica respalda el uso de herramientas visuales para el aprendizaje, como demuestra la Dual Coding Theory (Paivio), la Cognitive Load Theory (Sweller), y los trabajos de Mayer, Novak y Cañas. Estos modelos ayudan a comprender conceptos complejos al combinar imágenes y palabras. Sin embargo, Norman subraya que este respaldo no se extiende necesariamente a los modelos mismos que usamos para representar realidades sociales.

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Un marco o sistema de gestión del conocimiento


Un marco de gestión del conocimiento (GC) es un sistema completo de personas, procesos, tecnología y gobernanza, que garantiza que la gestión del conocimiento se aplique de manera sistemática y eficaz para mejorar los resultados organizacionales.

– Gobierno de GC: sin un sistema de gobierno (y asignación de responsabilidades/accountability) que promueva, reconozca, valore e incentive el intercambio y la reutilización del conocimiento, cualquier intento de introducir la GC será una lucha difícil (una batalla casi perdida).

– Personas: en las organizaciones y comunidades los roles y responsabilidades para la gestión del conocimiento (1) deben establecerse y clarificarse, (2) deben configurarse para compartir y reutilizar el conocimiento tácito, los comportamientos tales como buscar y compartir el conocimiento deben ser incentivados y convertirse en ‘la forma en que trabajamos’

– Procesos de la GC: tiene que haber un proceso probado y comprobado para capturar, filtrar/destilar, validar, almacenar, aplicar y reutilizar el conocimiento, y también para innovar.

– Tecnologías de GC: las personas y el proceso deben contar con el apoyo de la tecnología habilitadora, que permita encontrar y acceder al conocimiento donde sea que se encuentre (en las bases de datos, en la Intranet, en las cabezas de las personas). La Tecnología de la Información (TI) juega un papel importante en GC, al proporcionar la tecnología para permitir que las personas se comuniquen.

Gestión de los conocimientos en el sistema de las Naciones Unidas: un proceso en marcha


Texto de una valoracion de la Gestión de los conocimientos en el
sistema de las Naciones Unidas de la Dependencia Común de Inspección de NNUU (2016):

Como recurso estratégico, los conocimientos requieren una evaluación constante de su uso mediante una gestión efectiva y productiva a fin de garantizar que son los óptimos. La gestión de los conocimientos sigue siendo un reto para las organizaciones del sistema de las Naciones Unidas que procuran desarrollar, organizar, compartir e integrar los conocimientos de manera sistemática y eficiente a fin de lograr sus objetivos transversales.

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