Kurt Wallender (Henning Mankel) y evaluación


Hace ya un tiempo  introduje en uno de mis posts el tema de la «ficción del desarrollo«. Hoy voy a contar sobre un activista que luego devino escritor (¿el post-desarrollo de la ficción?). Cuántas novelas podríamos escribir los que trabajamos en «desarrollo»…

A pesar de que hay algunas noticias sobre el declive de las novelas policiacas Nórdicas, el llamado «Nordic Noir«, quiero presentar hoy a uno de mis grandes compañeros de viaje, el detectice Kurt Wallender, gran evaluador y mejor persona.

Wallander es la creación del escritor sueco Henning Mankell. En 1989 Henning Mankell volvió a Suecia después de un largo periodo en África, especialmente en Mozambique, donde dirigió  desde 1986 el Teatro Avenida de Maputo (Mozambique).  A su regreso a Suecia, Henning Mankell quedó asombrado por la xenofobia que parecía haber comenzado a crecer en la sociedad sueca y decidió escribir sobre este tema. Dado que el racismo, según Mankell, es un delito, necesitaba un oficial de policía. De una búsqueda al azar en una guía telefónica nació el nombre de Kurt Wallander.

Entre 1991 y 2009, durante 18 años publicó  10 novelas de Wallander. La primera «Asesinos sin rostro» («Faceless killers») y la última «El hombre inquieto «(«The Troubled Man»).  Mankell es un intelectual de izquierdas comprometido activamente con su entorno (manifestaciones contra Vietnam y contra las guerras colonialistas, participó en una de las flotillas hacia Gaza en 2010, visita campos de refugiados…). En sus novelas hay muchas referencias a Africa y a las organizaciones humanitarias involucradas en África.

Algunas pistas para entender el universo (de ficción) Wallander:

  1. Kurt Wallander es un policía sueco obstinado y bueno pero, al mismo tiempo, difícil, gruñón y disfuncional. Aunque vive en una ciudad pequeña llamada Ystad, en la provincia de Skane al sur de Suecia, tiene el cansancio vital típico de un policía de una gran ciudad. Su entorno aparentemente por tanto es sereno, donde las cosas no deberían suceder, excepto que lo hacen: Las cosas (y vaya cosas) suceden muy, muy a menudo. Luego está el fondo: el suelo sombrío e implacable de la región Skane, en esta zona que hace frontera con Dinamarca. «Las áreas fronterizas tienen un dinamismo propio», dice Mankell.
  2. Otros policías luchan contra sus demonios, pero Wallander a menudo parece que está poseído por ellos. Sus ojos enrojecidos, su expresión devastada y su comportamiento derrotado apuntan a un hombre que nunca consigue un respiro de la frustración y la angustia que se acumulan dentro de él. Es  un hombre permanentemente al límite, «una especie de herida abierta». Un hombre que está aparentemente a un paso de tener un colapso total. Pero los malos días siguen sucediéndose, y Walander todavía sigue dando guerra. Cada crimen que resuelve o no (resuelve), todavía piensas que lo siguiente que va a hacer es simplemente…morir.
  3. La agonía mental de Wallander se debe en parte a su sensibilidad hiper-sensible por las víctimas de los crímenes, y a su inclinación por la introspección existencial mientras contempla su entorno.
  4. Hay un desequilibrio hacia detectives varones, pero cuidado eso no significa que no haya escritoras que escriben sobre detectives (sobre detectives mujeres o varones). Como en el caso de otros muchos otros detectives, el hogar de Wallander no es un ejemplo de armonía (para otro día dejaré el analizar este asunto, muy relacionado con el trabajo de investigación o evaluación y el equilibrio familiar). Walander es desordenado tanto en sus hábitos de sueño (duerme poco), como en sus hábitos alimenticios: toma café continuamente, come a deshoras y cualquier cosa (es adicto a la comida rápida). Su esposa lo dejó por otro hombre, tiene una relación difícil (lamentable) tanto con su hija Linda, como con su padre envejecido, cuyas capacidades mentales están fallando rápidamente. Entonces, ¿cuál es la atracción? Quizás es su autodestrucción intransigente, sus lamentables relaciones personales, su  incapacidad para mantener cualquier relación femenina lo que tanto fascina. Wallander es absolutamente insalvable. .
  5. Kurt Wallander tiene pocos verdaderos amigos y aunque tiene trazas de humor, no es exactamente la alegría de la huerta. Sin embargo, hay destellos de optimismo en la oscuridad de su alma, y ​​es capaz de ocasionalmente intentar la apariencia de una vida «normal». Su hija logra convencerlo de tener algunas citas y, en efecto, aunque dado lo absorbente de su labor policial parece que el amor no va con él, Wallander siente y tiene expectativas profundas hacia sus eventuales citas…y aunque se dé cuenta de que no presta suficiente atención al lado sentimental, paradójicamente se pregunta por qué fracasa continuamente.
  6. El teléfono de Wallander tiene un tono de llamada único. Es apropiado que su tono de llamada sea diferente a cualquier otro, porque enfatiza lo importante que es su teléfono para él. Es una conexión permanente con el lado oscuro, un recordatorio permanente de que un nuevo caso, una nueva pista, un nuevo giro diabólico pueden ocurrir en cualquier momento, sin importar dónde se encuentre. Lo más saludable sería que Wallander cambie su forma de ser, pero ser «saludable» no es lo que va con este obstinado detective bueno. Resolver casos y luchar sin cesar con su pasado… eso es lo que le va.
  7. Wallander es sistemático en la documentación de sus informes. Cuando descubre que su hija escribe poesía su reflexión es que él mismo escribe mucho y de forma metódica, pero solo informes de policía. En su enfoque de investigación es intuitivo, sensible (a veces incluso quiere sentir lo que pasó cuando visita escenas del crimen), persistente y  busca sistemáticamente un modus operandi. Su forma de liderar equipos es peculiar ya que pone al límite a su grupo (reuniones de trabajo durante los fines de semana hasta la madrugada), pero sabe ser generoso y distribuye el trabajo según el valor añadido de cada cual. Podríamos decir que como tantos otros detectives, es un evaluador con un método ( «Profundizar normalmente nos lleva hacia adelante» (La Pirámide)), pero también con duende (sus hallazgos son una mezcla de azar, casualidad, obsesión y perseverancia): como decía Picasso «cuando llegue la inspiración que me encuentre trabajando». Wallander sigue las pistas (los patrones de comportamiento) hasta la extenuación, hasta que no dan más de sí, bien porque llevan a una vía muerta…o bien porque nos dan las conclusiones correctas (o porque estamos cerca del final del libro que no queremos que termine (i)

¿Cómo no encontrar paralelismos de algunos de los puntos anteriores con la evaluación?. El oficio de evaluación conjuga también trabajo en equipo con períodos de trabajo en solitario. Es a veces  difícil dejar de pensar en el caso (de estudio) que se tiene entre manos, ya que todo el tiempo es poco y siempre hay nuevas perspectivas o matices que añadir. Con la actual tendencia a trabajar a través de asociaciones de evaluación o grupos de colegas, tenemos nuestra propia red, es nuestra conexión permanente con el «lado oscuro», con nuevas pistas para nuevos casos.  Y para finalizar, en este oficio de la evaluación a veces también intentamos la apariencia de una vida «normal» (cuando raro es el evaluador(a) que no es un freaky consumado).

Bueno pues quizás algun@ podáis ver también alguna similitud más…y comentarnos 🙂

Todos tenemos un poco de Mankell/Wallander dentro de nosotros. Larga vida a Mankell, larga vida a ese personaje tan real y ya no tan de ficción: Kurt Wallander. Prueba de ello es que ya ha sido encarnado en las pantallas por tres actores diferentes:

Kurt Wallander (Rolf Lassgard, Kenneth Branagh y Krister Henriksson), de Henning Mankell

Mankell murió en 2015 a los 67 años, dejándonos un poco solos, con un Wallander en decadencia y con la misma enfermedad que tuvo su padre…A Wallander  se le diagnostica diabetes y hacia el fin de su carrera sufre de pérdidas de memoria debidas al Alzheimer.

Mankell con refugiados congoleses en Uganda

…y para los que piensen que las novelas policíacas no son suficientemente intelectuales, porque no hablan de Scriven, Greene, Weiss, House, Stake, Stufflebeam o de Patton…pues ahí  va esta Cumbiera intelectual:

No hay profesionalización sin evaluación


 

Por casualidad, como suelen ser las cosas en un sector sin profesionalización, me comuniqué con mi colega eternamente al borde del caos, Pablo Rodríguez Bilella, y le comenté de la posibilidad de, en la próxima conferencia de la RELAC, hacer «algo conjunto» en relación a profesionalización de la evaluación. También recientemente hablé con María José Soler Fraile, presidenta de APROEVAL, sobre la necesidad de trabajar conjuntamente todas las asociaciones de evaluación de habla hispana, y mencionamos el tema de trabajar conjuntamente sobre el tema de la profesionalización.

Fruto de ese azar supe que el caótico y siempre complejo Pablo estaba escribiendo un artículo sobre el tema de la profesionalización en evaluación y, como buenos latinos, nos retamos a un intercambio «e-post-olar» con la posibilidad de atraer a otros desgraciados de este sector no profesionalizado…Como es habitual él se adelantó, él que es una metralleta de las redes sociales: Evaluación y profesionalización: ¿extraña pareja? (parte 1)…bueno pues ahora toca el momento de la remontada…

En este primer post para no perder el rumbo voy a filosofar…aunque  en muchos aspectos coincidimos Pablo y yo  (o, más humilde, coincido yo con él)

Y es que la evaluación es política, es técnica y…es filosofía (cómo entiendo yo aquí filosofía: dígase de lo que el vulgo evaluativo (yo incluido) piensa de las teorías evaluativas…aunque algunos quijotes y sancho panzas no dejen de decir aquello de que no hay mejor práctica que una buena teoría)

Pues en esta introducción doy tres ideas y hago un ejercicio de gestión del conocimiento, rescatando tres fragmentos de tres posts pasados:

 

1.Veo dos retos para la profesionalización de la evaluación: (1) centrarse demasiado en la cuestión técnica (tecnocrática) cuando la evaluación también es (o sobre todo es) política; y, si se consigue el progreso de la profesionalización, (2) centrarse sólo en el binomio  político y tecnocrático, con cuerpos de élite corporativos que se olvidan de su origen y de su fin social. Las asociaciones de evaluación deben cumplir su rol, sin caer en la trampa (1) de la tecnocracia y, cuando se relacionan con el tan peligroso y atractivo mundo del poder, (2) de venderse, sin escuchar a las bases y a la sociedad…ya lo sé, un circo de tres pistas, pero es lo que tiene la evaluación que, recordemos, es política, técnica y filosofía…y ojo ya hay hasta un congreso próximo sobre el rol de la evaluación en la era de la post verdad: Measuring What Matters in a Post-Truth Society

2.No es solo necesaria la profesionalización de la evaluación, sino que no olvidemos el rol transversal de la evaluación para el resto de profesiones: sin evaluación no hay profesionalización. Algunos de los campos más profesionalizados (funcionariado, medicina…) lo consiguieron a través de la incorporación de sistemas de control de calidad (integrando la doble vertiente de rendición de cuentas y aprendizaje que implica la evaluación)

3.No hay evaluación sin rendición de cuentas…y el mayor garante de la rendición de cuentas es el parlamento. Las Asociaciones de Evaluación (VOPEs) son importantes, pero debido a ese binomio técnico y político, hay que hacer lo posible para incorporar a los agentes de cambio político (como el parlamento) y social (otras asociaciones, academia y los medios de comunicación). EvalPartners tiene iniciativas muy interesantes para involucrar a los Parlamentos Nacionales en los procesos de desarrollo de capacidades en evaluación.

Por tanto, no podemos perder de vista que el camino hacia la profesionalización no es sólo técnico (tecnocrático), sino también político. Y ahí a veces nos pillan a los evaluadores, tan acostumbrados a nuestro trabajo solitario y sistemático con tantos nexos con la investigación (más centrados en el rigor, en la independencia y en la objetividad) y tan poco acostumbrados a la gestión y a la política (más sucia, menos independiente y más dada al regateo, al mercadeo y a los compromisos -a veces a cualquier precio-…de cara a la utilidad…o al pragmatismo)…cuánto cuesta en evaluación ese equilibrio tan inestable entre rigor, independencia y utilidad…

Tomo del post de Pablo un párrafo clave que marca el titánico camino que hay por delante para profesionalizar la evaluación. La fuente es de ese gran evaluador que fue primero técnico, después político y ahora una referencia (filosófica):

 

 

«Bob Picciotto, desde el marco de la sociología de las profesiones, sintetiza algunas de las características que debe construir una agenda para la profesionalización de evaluación:

(1) el reconocimiento público que la ocupación promueve el interés general; 

(2) procesos reconocidos de desarrollo disciplinar (educación especializada, exposición continua a la práctica de expertos);

(3) autonomía profesional (la propia profesión controla la contratación, la calidad de la formación, la aprobación de directrices profesionales, la aplicación de normas éticas, etc.);

(4) el acceso a la práctica (la institucionalización de la experiencia profesional mediante la educación terciaria de alta calidad y una amplia gama de posibles restricciones sobre el acceso a la práctica profesional: designación, acreditación, certificación, licencias).»

En mi próximo post centraré un poco más el tema y trataré de hablar del proceso que está realizando el grupo de profesionalización del Sociedad Europea de Evaluación del que soy miembro.

Tres ideas  ya contadas y tres antiguos posts sobre evaluación, carreras profesional y asociacionismo: Y como prometido, dejo aquí  los tres posts del pasado, terminando aquí esta primera e-post-ola.

 

Asociacionismo en evaluación –capítulo primero

(Octubre de 2014)

Más que nunca necesitamos del asociacionismo para aumentar nuestro capital social, humano y técnico, aumentando la capacidad de análisis, escucha, respuesta y servicio. Pero no debe ser fácil cuando hasta ahora no se ha llegado a las bases con una propuesta de verdadero trabajo en red y mutuamente beneficiosa, en la que se den soluciones de forma proactiva a problemas comunes o colectivos, en el que las bases se involucren de forma también proactiva y los boards o élites dirigentes, actúen para el pueblo y con el pueblo, y en representación de y con sus miembros

Acade: ¿por qué la sociedad española no se ha movilizado ante la reducción de la ayuda?

(28 Octubre del 2013)

“La sociedad civil organizada ha cambiado su papel y ya no habla en nombre de otros”. Aquí se mencionaron movimientos como el 15 M o las redes sociales. “No se necesitaba a la ciudadanía y la cooperación se ha dedicado a otras cosas…y se han perdido a las bases”. No se tuvo la suficiente visión de que la “sociedad civil organizada es capaz de crear opinión y estar sintonía con la sociedad. Luchar contra las desigualdades no implica sólo luchar contra la pobreza”. “La sociedad civil (organizada) ha tenido un problema de comunicación, aunque también ha habido problemas con el papel del liderazgo público”. A este punto durante el turno de palabra indiqué que no sólo era un problema de comunicación en el sentido de enviar el mensaje (de convencer), sino en el de escuchar. Pero hubo más sobre este punto:

-“El sector de ONGD está fragmentado. Pero el problema del apoyo social no es sólo de España. No se ha sido capaz de demostrar que la ayuda sirve para algo, de que la ayuda funciona”. Por otra parte hay muchos“peligros buscando atajos del norte al sur”.

– La base no se necesitaba porque estaban los profesionales. Se buscó “la profesionalización pero no un liderazgo asociativo” con el apoyo de las bases.

-“Ha habido un problema de mala gestión del accountability, ya que se ha entendido un accountability hacia el financiador. En España no tenemos conciencia de que lo público es de todos. Se debería haber hablado con la sociedad sobre los avances. No ha existido una política de transparencia”.”No ha habido suficiente diálogo y después el dinero público se ha retirado.”.

En este punto también señalé algunas ideas durante el turno de palabra de la jornada: Las afirmaciones anteriores, de ser ciertas, “iban en contra elementos básicos de la democracia participativa”. En un colectivo y sector para el que el concepto de participación parece tan importante, esto aumenta la carga de retórica de su discurso (o sus discursos). Repitamos: ¿No se necesitaba a la ciudadanía? ¿No había una política pública de estado?. También señalé que al binomio política vs tecnocracia había que añadir las dinámicas personalistas (o grupales) de poder. Éstas implican que el único deseo de cambio que se desea es “quítate tú para ponerme yo”, para mandar, mandar porque puedo. También es de señalar la magnitud de la retórica de una política ilustrada debido a la distancia con la sociedad civil, y que a su vez ha dado lugar a más distancia entre la sociedad y la política.

¿Carrera profesional en la cooperación española? La soledad de la carrera de fondo

(22 Mayo 2013)

…es un sector de profesionales poco valorado, desestructurado, sin sentimiento de cuerpo y, en consecuencia, en el que prima más el “qué hay de lo mío” y el “sálvese quien pueda”, que una visión colectiva sobre cómo debería ser un sector profesional en coherencia con la agenda de eficacia, en la que “de verdad” primaran los intereses de los más pobres (destinatarios por la vía de la apropiación y alineamiento de la ayuda) y de la sociedad española (demandantes de reducción de la pobreza con la máxima eficacia, eficiencia, pertinencia e impacto posible). En este marco la Cooperación Española continuamente se está descapitalizando de sus profesionales, ya que no existen ni mecanismos, ni contextos, ni incentivos para dar la oportunidad o contar con los mejores profesionales en los puestos de responsabilidad y decisión.

Como resultado de los desincentivos anteriores las Agencias, Departamentos públicos y las ONGD españolas tienen una gran rotación de personal tanto de personal directivo, como técnico. Estos cambios hacen más necesarias las estrategias de Gestión del Conocimiento y tienen el peligro de tender a una visión cortoplacista y no estratégica. Asimismo en dichos Departamentos Públicos no suele haber objetivos ni indicadores claros a nivel organizacional, ni mecanismos eficaces de rendición de cuentas de forma bidireccional a los más altos niveles jerárquicos.” (Rodríguez Ariza, Carlos, 2009, página 32) La gestión de la información en las organizaciones de desarrollo (vol. II)

Eval Central Game Over: Being Chris Lysy


As I explained in my post evaluation and data visualisation, Chris Lysy is a huge and passionate artist and evaluator

Results logic chain by Chris Lysy

Results logic chain by Chris Lysy

Self description by Chris Lysy

Self description by Chris Lysy

Chris Lysy gave us EvalCentral and at one point he decided to take it away. He has his reasons, which can be read in his post turning off of the EvalCentral auto pilot. My admiration for Chris implies that I wonder what is being Chris Lysy…

But my point is that EvalCentral had become a kind of «public good» and had its own life, so I missed a period of reflection on the different alternatives for EvalCentral (including a the hand over to another person / institution that could manage the EvalCentral platform)

Maybe there is something I do not understand about it, so I asked my colleague Sara Vaca, Spanish evaluator, dataviz nerd and friend, to talk on my behalf to Chris during the coming Congress of the American Evaluation Association and to discuss on it…

Even if I am not convinced, Chris says the following in his post turning off of the EvalCentral auto pilot :

I launched Eval Central just about 6 years ago. At that time there were only so many evaluators actively engaged in writing for the web.

For those interested in evaluation, it was hard to find evaluation bloggers. And then when you found one it was possible they had already quit blogging.

For new evaluation bloggers, it was hard to connect and build an audience.

I created Eval Central as a sort of automated matchmaker. It gave an audience to new bloggers, and gave those interested in evaluation an automated discovery tool that delivered relevant evaluation stories right to their inbox each day.

But times have changed.

Now it’s even easier to add your voice to the world. You can still do it with your own WordPress blog, but you could also write a post directly on LinkedIN, Medium, or any number of other publications. In just a couple of clicks from an account you already possess.

Subsequently, the original design of Eval Central just isn’t working the way I would like it to work. So, after a lot of thought, I decided to break it.

Starting soon, Eval Central will be a Medium Publication. And instead of bringing together blogs, I’ll be bringing together evaluators interested in writing and curating evaluating content.

There will be no more auto-pilot. Every post that appears on this site will be the result of a writer or curator deciding it should be here. I will need help.

If you’re interested in writing or curating for Eval Central, send me an email > chris@freshspectrum.com.

 

Dear Chris, many thanks for all your creativity and associative work, I wonder what means «after a lot of thought«…does it imply evaluative thinking or evaluative tools?…as a (former) member of the deceased EvalCentral I can say that nobody consulted me anything…

I am a romantic developmental evaluator, I would have liked a bit of contact and discussion between the Evalcentral participants…because in my perception EvalCentral was a living being that existed beyond Chris Lysy…

Could we think in reviving something similar to Evalcentral? Could it make sense and be still relevant something like Evalcentral? I think so…I do not know if other evaluation colleagues think like me…

I use to end my posts with a song, I selected this one. From the other side of the Atlantic I want to invite to start a period of reflection (to my American evaluation colleagues -including ALL the Americans not only these of the northern part),  (as I said I am a romantic): is it worth EvalCentral as we knew it?…

…long life to Eval Central…

 

A veces nos pasa evaluando. Contradicciones de un soldado de fortuna…digo, de un evaluador independiente


Uno empieza a tener historias que contar como el abuelo cebolleta, contar cuentos y aventuras de esta profesión de evaluación que pocos fuera entienden. Me han ofrecido la oportunidad de intercambiar sobre experiencias en evaluación en la próxima conferencia de la RELAC, cuando justamente ya tenía esbozado este post, sirva pues como adelanto…

A veces olvido que la empatía es un prerrequisito, una condición necesaria para el oficio de evaluación…demasiados prejuicios, ideas preconcebidas…antes la pregunta, la discusión, el conocimiento, luego juzgar, como en la vida misma.

A veces llaman a tu puerta y te dan una evaluación llave en mano – ¡¡¡¡ – A veces preparas propuestas muy buenas durante días y ni siquiera te dan las gracias…

A veces haces conclusiones y recomendaciones, y unos contentos y otros se rasgan las vestiduras, en fin nunca llueve a gusto de todos…una vez aprendí de un gran profesional que no estamos en esto de la evaluación para hacer amigos –al menos como primer objetivo claro, amigos se pueden hacer y muchos…

Cuánto cuesta tener suficiente autoconfianza y dejar de pensar que no eres sólo tu último trabajo de evaluación, que no pasa nada por pifiarla una vez, que somos algo más, un camino, no un momento ni un lugar. A veces como evaluadores nos pegan palos hasta en el carnet de identidad y donde menos te lo esperas…pero no pasa nada…nada  ¡¡¡¡

Uno ha de estar enfocado a la utilización y al servicio al cliente, esto incluye a veces el servicio post venta…A veces cuando crees que el proceso evaluativo ha terminado no paran de llamarte para que respondas a los comentarios de este actor que -lo siento- no respondió a tiempo, o para que hagas una nueva presentación o un nuevo informe de evaluación en formato página, díptico o tríptico…y otras he tenido que indicar reiteradamente –y sin éxito- a la organización evaluada, que debemos hacer una presentación como parte del proceso de validación…

A veces me he encontrado con que el gestor de la evaluación era el gestor del proyecto…y, mira por dónde, te cuestionaban las conclusiones cuando se referían a retos, pero no cuando se referían a fortalezas… y no ha sido nada, nada fácil…

A veces me he encontrado con gestores de evaluación encantadores, con los que se establecía una relación de confianza y colaboración…y de aprendizaje…y a veces con otros con los que no había tanta confianza, ni colaboración…y el aprendizaje era menor…empezando por aquella vez cuando en la primera reunión nos dejaron bien claro que éramos el menos malo de los equipos evaluadores…pues vaya…

A veces el gestor me ha dejado libertad de actuación y otras me han tenido hablando durante horas y horas hasta el amanecer…debido a la diferencia horaria entre las dos orillas del gran charco

A veces he encontrado evaluaciones bien pagadas, otras muy mal pagadas, es increíble este desfase…es un error táctico meterse en una evaluación mal pagada, ya es un indicador de que todo puede funcionar mal, además no significa que luego te vayan a exigir menos, aunque la otra parte, el pagador, no haya cumplido su parte de valorar correctamente tu trabajo…

A veces he encontrado en los proyectos que he evaluado rastros de algo parecido al enfoque de género…pero en muchos el género se ha evaporado en el camino…

Yo prefiero el adjetivo independiente, que el sustantivo consultor. A veces ser independiente te da la oportunidad de comunicarte y tener voz, tu voz, tanto de forma oficial como oficiosa, a través de las asociaciones de evaluación –VOPES-, por ejemplo…y a veces ser independiente te introduce en una caverna de aislamiento, en la soledad del corredor de fondo – no estoy solo, me tengo a mí y a mis circunstancias..a todo -todas y todos- lo que llevo a mis espaldas y en mis pies y en mis manos…aunque no está mal a veces llamar por teléfono a los colegas claro

A veces las compañías aéreas engañan…cualquiera un poco viajado lo sabe…Quatar Airways o Emirates..son MUUUUUUUUUUUCHO mejores que IBERIA o American Airlines…otro día hablaremos de la tortura que supone pasar por ciertos países o aeropuertos…donde a uno le hacen sentir como a un delincuente…

SIEMPRE. SIEMPRE he conocido nuevos horizontes y gentes, he aprendido algo nuevo en cada evaluación o proceso evaluativo, algo que cambiar, algo que mejorar…

A veces eres lo que comes, otras eres lo que lees o lo que escuchas. Bueno pues os dejo con este A veces de hace un tiempo, de todos los tiempos…os dejo con la senda del tiempo.

Asociacionismo en evaluación, sí PODEMOS, pero no sólo con buenas intenciones, y van dos


 

A raíz de mi pasado post sobre asociacionismo en evaluación, mi colega y sin embargo amigo Pablo Rodríguez-Bilella contestó con su propio post VOPEs, asociacionismo, y evaluación… una #eval conversación…Cuando sea mayor, espero ser tan prolífico como Pablo…siempre es un honor caer al borde del caos…Retomo pues la #eval conversación, con los temas que Pablo dijo que yo dije, aunque si lo dije…seguro que no fue tan bien como él –es lo que pasa cuando los artistas transforman palabras en mensajes que calan…y en eso consiste la evaluación en parte, en moldear adecuadamente diferentes discursos en uno solo que cale…Uno empieza con ánimo estos posts porque sabe que al menos uno le va a leer, uno además de uno mismo me refiero, y digo uno, porque quiero creer que Pablo tomará unos minutos de su multi social agenda para leer lo prometido y esperado. Pero vamos al grano –

Pablo dice que yo dije que el tema del asociacionismo en evaluación está de moda

Evalpartners se autodefine como un movimiento global para reforzar un contexto apropiado para la evaluación a diferentes niveles, basado en el compromiso de las VOPEs, organizaciones voluntarias para la influencia y promoción de la evaluación para mejorar la política pública. 2015 es el año internacional de la evaluación.

Nos hemos de felicitar porque se haya conseguido que el asociacionismo en evaluación esté de moda, pero hemos de conseguir que la moda dure y tenga el mayor efecto o influencia estructural posible –lo que Evalpartners llama contexto yo lo llamo estructura, para diferenciarlo de factores externos -o contexto- que son muy difíciles de influir y nos influyen más a nosotros que al contrario.

Marco Segone dijo en la charla inaugural de la EES en Dublín, que con EVALPARTNERS se quería posicionar la evaluación en la arena políticaPor cierto voy a utilizar este vídeo en un taller de desarrollo de capacidades en evaluación, no centralmente para hablar de Evalpartners, que también, sino para hablar sobre la importancia del liderazgo en evaluación. Y es que es un gran mensaje, una auténtica frase que engancha de Evalpatners, parecida al Yes we can de Obama, a la de M.L.King, Tengo un sueño ¡¡ nuestro sueño ¡¡ …pero cuidado, a veces corremos el riesgo de que nuestros sueños se hagan realidad…las arenas políticas son movedizas…recordemos que la política con minúsculas convive demasiado con la retórica…

Esta vez es wikipedia la que señala que la retórica es la disciplina transversal a distintos campos de conocimiento que se ocupa de estudiar y de sistematizar procedimientos y técnicas de utilización del lenguaje, puestos al servicio de una finalidad persuasiva y estética, añadida a su finalidad comunicativa. La retórica es lo que queda cuando pasa la exaltación de la amistad durante una borrachera colectiva…El ciclo político tiene necesariamente una parte importante de retórica en el corto plazo, para avanzar quizás -en el mejor de los casos- hacia mejoras concretas y reales en el largo plazo. El peligro de esta moda que nos toca, es que vendrán toneladas de buenas intenciones, muchas más reuniones en hoteles de lujo, muchas fotos, cócteles, discursos, muchos compromisos institucionales, pactos, acuerdos, declaraciones al más alto nivel, atención  ¡ todos quietos ¡ más fotos, …y el riesgo de la retórica aumentará de manera exponencial.

Una de las formas de controlar esta retórica –que como dije siempre ha de existir porque hablamos de política-, sería el compromiso y los medios desde el principio para el aprendizaje y la mutua rendición de cuentas sobre lo que se hace y cómo, por qué, para qué y en especial para quién se hacen las actividades y procesos de fortalecimiento de la función y sistemas de evaluación. ¡Para quién se hacen las cosas¡. Las desequilibradas relaciones de poder no son explícitas pero están ahí normalmente, tanto en la sociedad, en la política, en el sector de la ayuda y en los sistemas de evaluación, como en administraciones públicas, agencias donantes multi y bilaterales, ONGD internacionales, boards de las asociaciones de evaluación…Yo entiendo que Evalpartners se ha hecho para las las personas, especialmente las que tienen menos poder, sean funcionari@s, voluntari@s, evaluador@s o implicad@s en procesos de desarrollo.

La evaluación, al menos mi forma de entender y creer en la evaluación, es sinónimo de más equidad, mutua rendición de cuentas, transparencia, democracia, distribución de poder…La función de evaluación no vive ajen al mundo, aunque a veces parezca que sí, por la pureza de la que se quiere revestir en ocasiones…Las relaciones de poder existen en todos estos actores, sistemas, procesos y estructuras evaluativas. Los cambios por tanto que se persiguen son enormes y la posibilidad de frustración grande. Por eso la importancia de gestionar y modular expectativas, al menos en el muy corto plazo, y de tener una estrategia de influencia y gestión del conocimiento en el medio largo plazo. Supongo que lo que tendría que salir del 2015 es una hoja de ruta en la que la evaluación se integre realmente en la ronda de desarrollo que sigue a estos objetivos de desarrollo del milenio –El Post 2015- …aparte del buenismo y las buenas intenciones…

Si las VOPEs -Organizaciones Voluntarias para la Evaluación Profesional- tienen una función social, un objetivo social, tendrían que saber interiorizarla, conocer sus retos y explicarlos. O metiéndonos ya en nuestro particular argot ininteligible para el común de los mortales, tendrían que conocer la diferencia entre la teoría del cambio que querían y la que está ocurriendo. Un reto para cada una de las VOPEs en sus contextos concretos será poner la evaluación más allá de la arena política, esto es, en la arena social, tanto en la de los valores sociales como en la de la práctica social…estando un poco más cerca de que la mutua rendición de cuentas y la evaluación sean demandadas activamente por la sociedad ¡

Por tanto, sobre modas, ojalá la moda evaluativa fuera tan potente como para que no sólo políticos, planificadores, gestores, sino-y aquí está un reto mayúsculo- la ciudadanía comprendiese la importancia de la evaluación y todo este ciclo no sea algo desde nosotros los geeks, freakis o raritos de la evaluación –desde diversas situaciones de poder recordemos- hacia nosotros los geeks, freakis o raritos, para darnos palmaditas, hacer amigos y de paso conseguir o intercambiar algo de poder o de trabajo…Lo de que mi madre comprenda lo que hago en evaluación en el sector del desarrollo, lo dejo por imposible, porque aunque Evalpartners se lo propusiera no lo conseguiría ni en un año evaluativo entero…contárselo a mis hijos es otra historia, no menos difícil pero con sus retos…sobre todo cuando tus hijos te dicen que los padres de sus amigos tienen oficios de verdad como médico o profesor…

El problema también es cuando algunas VOPEs no funcionan y son parte del problema, como en España, que muchos partidos no funcionan y son también la causa del problema a superar…¡¡¡ ciencia de la complejidad causa y efecto son uno ¡¡¡. Ahora que muchas VOPES son todavía jóvenes -aunque otras estén envejeciendo prematuramente-, quizás venga a cuento establecer la comparación entre las VOPES y los partidos políticos, comparación que gira en torno al ciclo de vida de una organización.

En España está tomando fuerza lo que antes era un movimiento social y ahora se ha convertido en partido –PODEMOS. Aunque no sin ciertos temores porque parece que nos están vendiendo el cielo nuevamente, la razón de ser y la base de la fortaleza de PODEMOS -y esto sonará a muchos colegas de América Latina- es que en estos momentos estamos pasando por una etapa de gran desafección política, unida a importantes inequidades sociales. Se comenta que los modelos de partidos forjados en nuestra transición ya no funcionan. Esos modelos de partidos, modelos asociativos, tomaron al asalto el estado y han impuesto durante más de 35 años una forma de funcionamiento que ya se está agotando. En mi opinión también forma parte de la triste herencia de nuestra dictadura y de su nefasto efecto sobre las prácticas sociales e institucionales…algo que tarda varias generaciones en recuperarse…Y es que en mi país, ese país que pretende dar lecciones de gobernabilidad a América Latina, la corrupción vuelve a estar de moda, y no es algo superfluo, sino algo verdaderamente sistémico-estructural, aunque nuestros políticos sigan sin reconocerlo o pretendan que no se puede hacer más. Me gustaría pues que la mutua rendición de cuentas estuviera de moda en España, aunque fuese transitoria, porque algo quedaría y beneficiaría y mucho a la función de evaluación. Dejo para otro día discutir si el origen de todo es que los españoles somos más permisivos, o corruptos, o permisivos frente a la corrupción que los noruegos o los daneses, o a que hay menos control –o a razones histórico estructurales relacionadas con la desconfianza del ciudadano en todo lo político y público. Dejo aquí las reflexiones de Antonio Muñoz Molina de cómo una cultura civil muy degradada ha fomentado en España el ejercicio de poder sin responsabilidad, en su artículo sobre la Corrupción y el mérito.

A mi padre le hubiera encantado analizar este fenómeno como continuación de su tesis doctoral sobre los partidos políticos como grandes organizaciones que actúan en el mercado a la manera de las compañías oligopólicas o, en términos politológicos, con un modelo organizativo del partido cartel. Quizás dentro de poco será algo del pasado…

Pero para cerrar esta divagación localista-perdón compañeros de América-, ¡ Podemos ¡, sí podemos encontrar una similitud quizás con las VOPEs, como ya he dicho, con el concepto de ciclo de vida de un partido y la importancia de saber encontrar el nicho o cuándo un modelo ha llegado a su decadencia…para mejorarlo o sustituirlo…en lugar de crear-

-i.-asociaciones sin una finalidad clara -durante un año fui socio de IDEAS y debo ser un poco zote, porque no logré llegar a saber la diferencia entre ser socio y no serlo…como sí me queda clarísimo el valor añadido de mi pertenencia a la AEA y con mi pertenencia a la EES

-ii-. asociaciones superpuestas o paralelas –en América Latina hay dos por ejemplo, la REDLACME y la RELAC, no llego a comprender bien por qué

-iii- o seguir con modelos que no funcionan…

…y para ello se ha de evaluar el funcionamiento de las VOPEs, encontrando además cuál es el mejor equilibrio entre el valor añadido que los socios pueden esperar de sus asociaciones y el valor añadido que los socios dan a las asociaciones…

Otro día sigo con algo más que Pablo dijo que yo dije…

2) Pablo dijo que yo dije que es una deuda que las VOPEs cumplan su importante función social: carrera profesional, superación de la fragmentación y aislamiento del colectivo de evaluadores, desconexión entre “bases” y “elites” de las VOPEs;

3) Pablo dijo que yo dije que algunos problemas que podrían superarse si, al menos e inicialmente, tomaran de su propia medicina, esto es, la evaluación de las VOPEs mismas

…pero esa otra historia que deberá ser contada en otro momento…

Asociacionismo en evaluación –capítulo primero


He vuelto de la conferencia de la Sociedad Europea de Evaluación en Dublín con sentimientos algo contradictorios.
Ésta es la quinta conferencia de la EES a la que acudo. Sevilla 2002 siendo doctorando, Berlín 2004 doctorando, Lisboa 2008 siendo gestor de evaluaciones para la DGPOLDE, Praga 2010 siendo gestor de evaluaciones y…Dublín siendo evaluador independiente…
Hay gente que he seguido viendo desde hace doce años y otras caras nuevas. Lo que no ha dejado de cambiar es la comida y el precio…
-La comida…ya ha ganado el estilo anglosajón del MAL-comer en el que si no eres nórdico o anglosajón, ni comes ni haces networking…
-El precio…desde alrededor de 300 hasta más de 500 euros…y eso lo indiqué en la asamblea de miembros, que una conferencia que se centraba en la equidad no puede tener esos precios claramente injustos, 1. Porque cobra igual a un miembro del Banco Mundial al que financia su institución, que a un consultor independiente con familia numerosa, que no tiene asegurado sus ingresos para el próximo mes. 2. Porque da becas a personas de lo que denominan países en desarrollo sin incluir criterios de renta para ello…iguales pero diferentes…
Pero el precio de la conferencia es la punta del iceberg del problema del número de socios…Me queda claro que el tema del asociacionismo en evaluación no se ha resuelto ni en España ni en Europa. La EES necesita más socios dinámicos y proactivos y menos precio en sus cuotas…
Podríamos correr el riesgo de pensar que el asociacionismo no sirve…pero aplicando el esquema del cooperativismo agrario en el que se decía lo mismo, la misma respuesta puede servir…solo nos acordamos del asociacionismo cuando las cosas van mal…y cuando las cosas van mal, nada funciona…
El tema del asociacionismo en evaluación está de moda…en España tenemos la Sociedad Española de Evaluación y dos asociaciones o redes nuevas de dos másteres o magísteres de evaluación, la red internacional de evaluación y la asociación de profesionales de evaluación. Ello en ciernes del 2015, año internacional de la evaluación y el proceso Evalpartners…
Y ese es otro tema, como conseguir que las asociaciones cumplan su importante función social…cuando es una necesidad clara en nuestro gremio que como tantos otros en España no tiene carrera profesional y está fragmentado, dividido, desconfiado…que vive más del oportunismo que del desarrollo de oportunidades…
Más que nunca necesitamos del asociacionismo para aumentar nuestro capital social, humano y técnico, aumentando la capacidad de análisis, escucha, respuesta y servicio. Pero no debe ser fácil cuando hasta ahora no se ha llegado a las bases con una propuesta de verdadero trabajo en red y mutuamente beneficiosa, en la que se den soluciones de forma proactiva a problemas comunes o colectivos, en el que las bases se involucren de forma también proactiva y los boards o élites dirigentes, actúen para el pueblo y con el pueblo, y en representación de y con sus miembros…para ello haría falta –entre otras cosas – un ejercicio importante de mutua rendición de cuentas y aprendizaje- una dosis de nuestra propia medicina, vamos, de EVALUACION- Una evaluación de lo que este tipo de asociaciones o redes de evaluación han querido y venido haciendo, de su público objetivo deseado y real…pero esa es otra historia que tendrá que ser contada en otro momento…